POLITICARNAVAL

Si se fijan un poco, pueden comprobar la confluencia en estas fechas de dos acontecimientos totalmente diferentes pero a la vez muy semejantes: carnaval y periodo electoral. A veces cuesta distinguir cual es cual. Ambos tienen como elemento central el disfraz. Correcto. Los políticos se disfrazan estos días de promesas, de soluciones, de seguridad y prosperidad, incluso algunos osan enfundarse el delicado traje de la definitiva paz. Todos cubren su rostro con la máscara de la sonrisa eterna. Además de las baratas. De esas que podemos comprar en cualquier tienda de todo a 100. Pero, sin duda, el disfraz estrella es uno que destaca por encima de los demás porque parece perfecto y elaborado con minuciosidad. De hecho, irradia extrema elegancia y personalidad. Está confeccionado por la diseñadora hipocresía y pertenece a la colección única de la falsedad. Modelos selectos desfilan con él en la pasarela mítines con esbelta naturalidad. Por si había alguna duda, me refiero al disfraz de candidato a la presidencia. Llegaremos entonces al momento cumbre: el certamen o las elecciones. Y he aquí la diferencia entre los dos periodos comparados. El carnaval termina con el final del certamen, mientras que el disfraz político se mantendrá antes, durante y después de las elecciones. Ya me contarán.
3 comentarios
Jose Lui -
Yorch -
Alfredo -